CUANDO

Cuando creía caer en el vórtice
fueron tus manos las que me salvaron,
cuando sentía perder el aliento
fueron tus suspiros los que me ayudaron.

Cuando perdía toda esperanza
cuando era victima de agonía
cuando esta vida daba por vencida,
fuiste tú quien me la regresó.

Fuiste tú quien despertó mis sonrisas,
fuiste tú quien me dio vida,
pero ahora no fuiste, eres
eres tú quien me da felicidad,
eres tú y nadie más. 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

LLOVIZNA MORTAL

LINDA ERES...

COMO LA LUNA