HUELLAS

Los matices de mis cantares
son solo sobras de mi herida
ya quedan del ayer cicatrices
ni llanto ni nada a la perdida.

Voz en silencio en el movimiento
principia el tono del viejo juglar
que ya no siente gozo ni tormento
simplemente camina en su andar.

Ruidoso estruendo del cielo
mientras la santa clara divina
mengua en el final del ciclo
mientras bebo sorbos de nada.

A través de lo que no hay aquí
que se esfuma con el viento y el mar
deja tu huella en roca de aliento
que viajará una completa eternidad.

Llega a dónde tengas que llegar
yo seguiré a mi verdadero destino
que paso a paso se va a forjar.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

LLOVIZNA MORTAL

LINDA ERES...

COMO LA LUNA